Lo denominaron “el Delta de Surrey”, en humorística referencia al celebrado Delta del Misisipi, cuna del blues afroamericano. Efectivamente, en el condado de Surrey, pegadito al área metropolitana de Londres, nacieron hacia 1944 tres de los guitarristas definitorios del glorioso rock inglés: Jimmy Page, Jeff Beck y Eric Clapton. Y sí, se conocieron, intercambiaron enseñanzas e incluso fueron pasando por las filas de un grupo-catapulta: los Yardbirds. De aquel trío de hacheros, como se decía entonces, se puede afirmar que Jeff Beck, muerto el martes, fue el más imaginativo y, posiblemente, el mejor dotado en términos técnicos.